En Santo Domingo Este se juega la pelota dura.
Mientras Neney Cabrera no quiere solucionar lo del TRANSFER para que se llene completamente y la ciudad no tenga donde llevar la basura, teniendo que dejarla en los barrios, él lanza un pupilo de aspirante a alcalde para aprovecharse de un impas que el presidente Abinader le dijo tenía que solucionar.
La ciudad espera y el funcionario del Gobierno Neney Cabrera apostando a que su partido y su alcalde queden mal para él entonces poder adueñarse de la ciudad.
La ciudad somos todos, no es solo el alcalde, el Gobierno está obligado a solucionar de una vez y por todas el tema de los vertederos a cielo abierto y el presidente debe obligar al señor Neney Cabrera a cumplir el decreto presidencial que puso en él la responsabilidad de solucionar el tema.
San Francisco solucionó su problema, San Pedro, también, la única que no puede solucionar el problema es Santo Domingo Este porque las aspiraciones de funcionarios del propio gobierno obstaculizan la solución.
Los del PROPEEP que dirige Neney Cabrera llegaron a san Luis creando la primera gran confusión que comenzó todo el caos mediático de la planta o el relleno en terrenos de Villa Liberación.
En realidad lo que se ha jugado a largo plazo es a socavar el liderazgo del actual alcalde Manuel Jiménez para ese equipo político de Neney Cabrera aprovecharse de ello y tomar el control de la ciudad.
El PROPEEP gastaron casi 100 millones de pesos en 45 días en la «ayuda» (envenenada) por la crisis llamada La Ruta de la Limpieza, pero si bien la demora de la solución podría verse normal, cuesta creer que ninguno de los regidores quiera ahondar sobre el tema y preguntar a los responsables de la solución definitiva al problema.
Ahora, aparecen regidores que, como en un plan estructurado quieren hacer considerar que el tema de la basura es solo de camiones cuando ellos saben que existen temas de donde poner la basura, pero esta parte del recorrido, no la quieren asumir.
Es hora que la ciudad entera quiera y exija que el tema de la basura se arregle en la ciudad, con camiones propios y una moderna planta de Tratamiento de Residuos Sólidos acordada seguro con alguna empresa privada seriamente licitada y darse cuenta, todos, que la demora de todo este proceso obedece a un plan macabro político de funcionarios del gobierno que desde el primer día juegan a la política en detrimento de la ciudad.
Es responsabilidad de todos los que tiene que ver con que al pueblo se le solucionen los problemas.
Santo Domingo Este somos todos, gobierno y oposición, alcalde, regidores, senador, gobernadora, pero todos parecen mirar al lado ante los planes contra la ciudad más grande del país y de mayor población, posiblemente por conveniencia, pero siempre en contra del pueblo, haciendo de santo Domingo Este no solo el lugar donde se juega la política más dura sino donde impera la traición contra sus ciudadanos.